Un operativo policial en la provincia de Cienfuegos, en el que se unieron las fuerzas del Ministerio del Interior (Minint) y la ayuda de la población, logró desarticular una maniobra delictiva que se llevaba a cabo al desviar varios productos de alta demanda por parte de la población para desviarlos a viviendas particulares con el objetivo de revenderlos ilegalmente.
Según se ha podido conocer, durante el operativo se detuvo a tres individuos carentes de vínculos laborales, de los cuales dos de ellos habían sido procesados en 2019 por acaparamiento.
El informe dado a conocer por las autoridades señala que los tres sujetos se dedicaban a “abastecerse” de productos de alta demanda en varias unidades de la cadena Caracol, entre ellas La Pecera, La Nueva Isla, las tiendas de los hoteles Pasacaballos y Faro Luna, así como el Almacén Central Territorial Cienfuegos, en las que pagaban una cantidad de dinero por encima del costo establecido para hacerse con los productos.
El mismo “modus operandis” fue ejecutado en sitios como El Mirador, el rápido Malecón y los Servi Cupet de Rancho Luna y Pueblo Griffo, lo cual les permitió acaparar grandes cantidades de cerveza Bucanero y Cristal, malta, leche condensada, galletas Saltinas, jugo de frutas, puré de tomate y detergente, entre otros.
En el registro llevado a cabo en la casa “almacén”, donde residía uno de los ciudadanos implicados, se lograron ocupar 22 latas de puré de tomate, 32 cajas de jugo de manzana y 118 de pera (cada una con 27 envases), 26 cajas de puré de tomate (cada una con 24 envases), tres cajas de Tigón (con 24 envases cada una) y 24 sueltas, cuatro sacos de nailon con puntillas, dos sacos con detergente, tres gomas de auto de uso y 23 mil 750 CUP.
A su vez, se pudo constatar que para trasladar las mercancías en cuestión se utilizó un panel matrícula B-005405, modelo Mitsubishi L- 300, de color blanco, perteneciente a la Cadena Caracol, cuyo chofer recibió 400 pesos en moneda nacional por cada viaje realizado.
Los trabajadores involucrados enfrentan cargos por el delito de malversación, ya que, aunque no hubo afectación económica a las entidades, si se produjo un desvío de mercancías que estaban destinadas a la población. Además, los tres ciudadanos implicados han sido acusados de actividad económica ilícita.
