El humorista cubano Limay Blanco se encuentra cumpliendo un año más de vida, y aunque por estos días no pueda salir a celebrar fuera debido a la situación sanitaria que atraviesa el país, el confinamiento no ha impedido que disfrute de una pequeña celebración junto a su esposa Glenda y su hija Maily, ni que soplara una vela en honor a su día.
Como mismo ha sucedido a todos los que nacieron por estas fechas, Muñi Muñi se encuentra cumpliendo años junto a los suyos en su casa, cumpliendo así una de las medidas sanitarias establecidas por las autoridades cubanas,quienes han recomendado ampliamente el mantenerse en las viviendas para evitar posibles contagios y cortar la cadena de transmisión.
Glenda se encargó de hacer partícipes a los seguidores de Limay, al compartir a través de su perfil de Instagram algunas fotografías y un video que inmortaliza el momento en que le cantan felicidades al cumpleañero mientras este se encuentra junto a dos tartas con bengala incluida.
Según puede apreciarse en las imágenes, Glenda le dio tremenda sorpresa a Limay, ya que uno de los cakes se trató de una reproducción en miniatura del auto Audi blanco que posee el humorista.
Además de la sorpresa preparada, Glenda aprovechó la oportunidad para dedicar unas emotivas palabras a su esposo, a quien, entre otras cosas, le confesó que quiere estar a su lado por el resto de todos los cumpleaños que faltan por venir.
«Muchísimas felicidades para ti mi amor. ¿Qué te puedo decir? que me siento muy feliz de poder celebrar otro año más a tu lado. Aunque este sea un poco diferente, lo más importante es que estamos juntos, incluso los que no están presentes hoy aquí siguen estando junto a ti. Te amo cada día de mi vida y si Dios quiere aquí estaré a tu lado en todos los cumpleaños que faltan por venir», escribió la joven.
El propio Limay también quiso compartir con sus seguidores la sorpresa que le había dado su esposa y subió a su cuenta de Instagram un pequeño video en el que muestra la peculiar torta de cumpleaños junto a su automóvil y en el que podemos ver a Glenda y al dulcero que le entregó el cake, ambos portando un nasobuco para protegerse.