Chilenos varados en Cuba por la crisis del coronavirus denuncian que los hoteles están llenos de cucarachas y ratones

Redacción

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Casi 300 turistas chilenos permanecen en Cuba este jueves, dos días después de que el país cerrara sus fronteras a la entrada de visitantes extranjeros y decretara que los que quedan no podrán salir de sus lugares de alojamiento.

La mayor parte de estos chilenos no pudieron abandonar la Isla antes del cierre de las fronteras pues Panamá lo hizo primero que la nación caribeña y suspendieron los vuelos de Copa Airlines, aerolinea que debía sacarlos del país.

“Fui a Copa Airlines y no tenían vuelo para ninguno de nosotros, por lo menos hasta el 21 de abril”, asegura Carolina Cox, una chilena de 32 años y actriz de profesión. Viajó a Cuba para estudiar en la Escuela de Cine y Televisión, pero justo cuando iba a regresar a su país quedó atrapada por esta crisis del coronavirus.

“Fue super terrible, yo soy estudiante, hay gente de tercera edad, familias. No hay dinero, tuvimos que pedir pañales porque ya no hay nada”, dijo Carolina.

El Consulado de Chile en La Habana los ubicó en un hotel de la capital, que según le dijeron, “era lo más barato que podían encontrar”. Se trata del Hotel Bella Habana, ubicado en la calle Conill y cuyas califiaciones de sus visitantes en lo sitios de internet hablan por si solas.

En ese lugar les cobran $30 dólares diariamente con una comida incluida. Sin embargo, como no tienen dinero suficiente, los chilenos han optado por distribuir los alimentos durante el día o “comprar una comida y repartirla a medias”.

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Pero ese no es el único problema: también están conviviendo con una plaga de ratones, cucarachas y varios insectos.

“No tenemos las medidas sanitarias y estamos súper expuestos al COVID-19, además no nos dejan salir del hotel”, comentó la joven turista chilena en un video publicado en las redes sociales.

“Necesitamos que nuestras autoridades chilenas se hagan responsable y nos puedan ayudar. Hay niños, adultos mayores y no podemos seguir en esta situación”, dice Carolina.

Además, insisten en que la situación está siendo insostenible, porque “se nos acaban los recursos y el hotel se está haciendo foco peligroso de contagio”. Por ello, hicieron un llamado a que se acelere su repatriación.