Gobierno cubano confirma que el transporte público se hunde con la crisis

Redacción

Gobierno cubano reconoce que más de la mitad del transporte estatal y de pasajeros está fuera de servicio en la isla por roturas

La crisis del transporte público en Cuba se intensifica, y así lo confirma el Ministro del sector, Eduardo Rodríguez Dávila, en declaraciones realizadas este jueves. Según sus propias palabras, la situación es preocupante tanto para el transporte de pasajeros como para el de carga.

Rodríguez Dávila reconoció en un programa especial transmitido en redes sociales y conducido por el presidente Miguel Díaz-Canel que el transporte público en la isla se encuentra en uno de los peores momentos de los últimos años. Las cifras son alarmantes: hace cinco años, el sistema transportaba alrededor de 5,8 o 5,9 millones de pasajeros diarios, mientras que hoy en día esa cifra se ha reducido a solo 2,7 millones.

Esta reducción drástica significa que más de la mitad de los cubanos se han visto obligados a buscar alternativas para transportarse, ya que no pueden depender del transporte público. La mitad de las rutas estatales presenta inestabilidad, lo que se traduce en largos tiempos de espera, trayectos irregulares y aglomeraciones. Además, muchos autobuses enfrentan problemas técnicos y escasez de combustible para operar.

Esta crisis del transporte público no solo afecta la comodidad de los ciudadanos, sino que también tiene un impacto directo en su calidad de vida. Se pierden horas valiosas tratando de trasladarse de un lugar a otro, lo que limita la movilidad hacia los lugares de trabajo y reduce las horas de trabajo efectivo.

Las autoridades cubanas señalan la falta de recursos y el embargo económico impuesto por Estados Unidos como las principales causas de esta crisis. Sin embargo, los expertos también apuntan a la ineficiencia del sistema de transporte estatal, la falta de inversión en infraestructura y la corrupción como factores que han contribuido al deterioro del servicio.

En resumen, la situación del transporte público en Cuba es crítica y parece empeorar con el tiempo. Los cubanos enfrentan una odisea diaria para movilizarse, mientras el gobierno lucha por encontrar soluciones efectivas a esta creciente problemática.